El año pasado, nos unimos a muchos otros para pedirle al DOE que tomara medidas audaces para construir un sistema de autobuses escolares que funcione para todos los estudiantes a los que está destinado. Nos alentó ver que el Canciller Carranza prestara la atención tan necesaria a esta cuestión. Si bien el DOE tomó algunas medidas positivas durante el año pasado, sigue existiendo una necesidad urgente de mejorar el transporte escolar. Este otoño, escuchamos a padres angustiados hablar de autobuses que no llegaban en absoluto, autobuses que llegaban tarde repetidamente, viajes en autobús que duraban horas, autobuses que llegaban sin la enfermera o asistente que los estudiantes necesitaban para sus necesidades médicas, autobuses que no no tienen espacio para las sillas de ruedas de los estudiantes, personal de autobús que carece de la capacitación necesaria para ayudar a los estudiantes con discapacidades y largos tiempos de espera para recibir asistencia de la Oficina de Transporte de Alumnos (OPT) del DOE. Escuchamos sobre niños que tuvieron que faltar a la escuela porque no había autobús para ellos.

El DOE debe arreglar su sistema de transporte para todos los estudiantes, incluidos los estudiantes con discapacidades, los estudiantes sin hogar y los estudiantes en hogares de crianza. Para los estudiantes con discapacidades, una necesidad particularmente urgente es mejorar la coordinación para que los estudiantes que necesitan adaptaciones médicas en el autobús las tengan disponibles el primer día de clases. Para garantizar que los estudiantes que viven en refugios puedan asistir y participar plenamente en la escuela todos los días, apoyamos firmemente el proyecto de ley del concejal Levin para crear un grupo de trabajo interinstitucional para fortalecer el transporte para estos estudiantes.

Otro tema que exige atención inmediata es el servicio de autobús para estudiantes en hogares de crianza. Para los estudiantes que han sido separados de sus familias y colocados en hogares de acogida, la escuela puede ser una fuente clave de estabilidad. La ley exige que el DOE transporte a los estudiantes entre sus ubicaciones de cuidado de crianza y las escuelas para que no tengan que transferirse cuando cambien de ubicación. A pesar de este mandato, el DOE no garantiza transporte en autobús ni siquiera a los estudiantes más jóvenes en hogares de crianza, y a menudo les entrega una MetroCard. De hecho, el informe de hoy muestra que el DOE negó el servicio de autobús a uno de cada cuatro estudiantes en cuidado de crianza que lo solicitaron, proporcionándoles únicamente una MetroCard. Para los estudiantes en hogares de acogida que no pueden viajar solos, una MetroCard es inútil.

El presupuesto de la Ciudad adoptado en junio de 2019 indicó que la Administración de Blasio garantizaría el transporte en autobús para los estudiantes en hogares de crianza, pero la Ciudad continúa negando el servicio de autobús a estos estudiantes.

Ningún estudiante en cuidado de crianza debería verse obligado a cambiar de escuela debido a la falta de transporte. La Ciudad debe honrar su compromiso de garantizar el transporte en autobús para los estudiantes en cuidado de crianza y cumplir con sus obligaciones según la ley.